Por Diego López Lira
El legendario grupo estadounidense Foreigner regresó a México para dar un nostálgico y poderoso concierto la noche del pasado viernes, en el Palacio de los Deportes de la CDMX.
Después de una larga ausencia, la banda se presentó en esta ocasión liderados por el vocalista Kelly Hansen, en representación de Mick Jones, guitarrista y fundador quien por circunstancias imprevistas no pudo venir, según lo informó la misma banda en un comunicado previo al concierto.
Aunque el concierto apenas rebasó la hora y media, el setlist fue más que complaciente para todos sus fans, con una efectiva selección de éxitos de su larga carrera musical.
Los neoyorquinos abrieron fuerte su presentación con ‘Double Vision’ seguida de ‘ Head Games’ y ‘Cold as Ice’ tres temas clásicos y representativos de su sonido más rockero, pertenecientes a sus primeros dos álbumes y en los que Hansen demostró con su poderosa voz que ha superado la difícil tarea de llenar los zapatos de Lou Gramm, el vocalista original.
Después vino el primer momento romántico de la noche con ‘Waiting for a Girl like You’ con el que el público se emocionó desde que sonaron los primeros acordes del teclado de Michael Bluestein. A ese siguió ‘That Was Yesterday’, temazo de su disco Agent Provocateur de 1984.
Nuevamente regresaron a sus orígenes de hard rock y las guitarras se hicieron presentes con ‘Dirty White Boy’ y ‘Feels like the First Time’ éste último de su primer disco homónimo de 1977.
Otro momento estelar fue cuando se empezaron a escuchar los primeros acordes del teclado en ‘Urgent’, su tema tal vez más conocido en México, el cual recibió una fuerte ovación, especialmente al escucharse el imponente saxofón de Thom Gimbel, que inmediatamente nos transportó a todos a 1981.
Después de un efectivo sólo de batería de Chris Frazer, se escuchó el poderoso bajo de Jeff Pilson, en la introducción de su clásico ‘Juke Box Hero’, mi tema favorito que aparece en el que sin duda es su mejor disco, Foreigner 4. El concierto cerró con su tema más conocido y romántico, ‘I Want to Know What Love is’, que por mucho fue el más coreado y aplaudido de la noche.
Definitivamente fue un gran concierto en el que quedó más que demostrado con su gran talento, porqué siguen siendo una banda tan amada por todos sus fans, quienes se entregaron por completo.
Todo fue casi perfecto, pero definitivamente se sintió la ausencia de Mick Jones, su líder y excelente guitarrista, quien se ha encargado afanosamente en mantener el legado de Foreigner vigente.
ponpausa.com 
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