Justo en la zona residencial de Desierto de los Leones, en la alcaldía Álvaro Obregón, se encuentra La Alcantarilla, un restaurante con terraza, parrilla, horno y mucha tranquilidad, un escondido lugar que hace que olvides que te encuentras en el medio de Ciudad de México.
Ver las diminutas luces colgar en el patio le convierte en un sitio acogedor y lo relajado de los meseros hace que te contagies de su tranquilidad. La carta es sencilla, pero no muestra lo mejor, y es aquí donde el responder alegremente el efusivo saludo de nuestra mesera nos pagó: «también tengo una pizza especial… pero no está en la carta».
Sin esperar detalle la seleccionamos, y unos 20 minutos después recibíamos una de las mejores pizzas que se pueden disfrutar en la ciudad. Se trata de «una pizza rellena de queso, salami, jamón serrano y un par de ingredientes secretos», nos explicó.
«A esto es a lo que deberían saber todas las pizzas», pienso mientras veo como el queso se estira y deja escapar un vapor que no hace más aumentar el placer. Sin duda, una de las mejores recomendaciones culinarias que se pueden hacer en la capital.
Luego de seguir con al sorpresa bocado a bocado, la tarde cerró con un strudel (apfelstrudel) con helado de vainilla y un red velvet y no hay manera de que nada de lo degustado quede en el olvido.
ponpausa.com 
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